En este incidente, un operador de proceso que trabajaba en un sistema de transporte neumático escuchó un crujido cuando se transportaba material en polvo entre el clasificador y la tolva de carga.
Durante la investigación del ruido, el operador entró en contacto con una sección del conducto y recibió una descarga estática significativa. Aunque el operador resultó ileso, la gravedad del incidente justificó un apagado completo del sistema para investigar cómo se habían podido acumular las cargas estáticas en una sección particular de los conductos.
Los sistemas de transporte neumático representan el corazón de cualquier sistema de manipulación de material a granel granular en muchas industrias en la actualidad. Al ser un método eficiente de transporte de material granular, estos sistemas permiten el transporte rápido de polvos entre procesos, lo que permite a las empresas mantenerse al día con una demanda de producción en constante crecimiento. Sin embargo, estos procesos no están exentos de riesgos.
Cuando el producto que se procesa se considera combustible y tiene una porción apreciable de material fino, la posibilidad de que se produzca una explosión aumenta drásticamente. Los polvos finos con bajo MIE (energías mínimas de ignición) alcanzarán regularmente la MEC (concentración mínima explosiva) junto con el sistema de transporte y pueden estar en riesgo de combustión por varias fuentes de ignición. Una de esas fuentes de ignición es la descarga electrostática.
Este estudio de caso de Newson Gale explora las trampas y desafíos de las operaciones de procesamiento de energía y las medidas de control después de que ocurrió un incidente en el que la electricidad estática fue la fuente de ignición.